Técnica ecológica y mironiana

Marcos González

Teniendo en cuenta el volumen de obra que esta pintora lleva realizada en el silencio de su taller durante varias décadas sin haber tenido nunca necesidad de mostrarla al público, y visto el éxito que ha obtenido cuando por fin ha hecho en la primavera de 1995 su primera exposición en Sevilla, creo interesante que Catalunya, dónde vive y trabaja, pueda ver una muestra amplia de su labor.

La técnica de que se vale es sumamente interesante y original. Podría calificarse, además, de “ecológica”, puesto que en lugar de dar a la tela la preparación habitual, la somete durante varios meses a la intemperie para que la Naturaleza imprima en ella su paso que habrá de servirle a la pintora como punto de partida.

En un brillante texto sobre Joan Miró, James Johnson Sweeney en 1970, con motivo de la inolvidable retrospectiva del Hospital de la Santa Cruz, decía que el pintor para realizar una obra partía de cualquier mancha caída al azar sobre la tela y citaba sus propias palabras: “Incluso una mancha de confitura vertida inadvertidamente sobre la tela puede inspirarme el tema; dibujo alrededor de ella y, a partir de ella, centro la composición… Incluso una salpicadura del pincel sobre la tela al limpiarlo puede sugerirme cómo comenzar una pintura. El segundo paso, sin embargo, lo calculo cuidadosamente. El primer estadio es libre, inconsciente, pero luego controlo al máximo la pintura con ese deseo de disciplina que siempre he sentido”. Cuando ví por primera vez la pintura de Marcos-González, recordé las palabras de Joan Miró. Tal es la importancia que la pintora da a ese punto de partida que la Naturaleza le brinda, que no le importa el duro y paciente trabajo que le supone pintar luego sobre una tela sin preparación. Y en contraste con estas manchas de óxido dejadas al azar, trabaja luego sometiéndose a una voluntad ordenada de la forma, estructurando la composición, buscando su equilibrio en la geometría y en la combinación armónica o disonante del color.

Marcos-González suele trabajar por series y puede decirse que explora una determinado tema hasta que lo considera anotado. La última de estas series es la que acaba de exponer en Sevilla, inspirada en la fiesta taurina, y la títula “Tauromias. Los toros a mí manera”.

María Lluïssa Borrás. Crítica de arte


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