Historias interminables

Marcos González

La pintora catalana Marcos-González vuelve estos días a sus orígenes castellanos con una treintena de cuadros, una treintena de “historias interminables”, tal como ella lo expresa.

Los amantes del arte y del mundo taurino tienen una cita obligada estos días en el Palacio de Garcigrande, con la exposición «Tauromias, los toros a mi manera», en la que la artista Marcos-González, de padre salmantino y de madre vallisoletana- da a conocer al público su pasión por el ambiente que rodea la fiesta nacional. Después de largos años de investigación en el mundo del arte y de los varios meses que emplea para pintar un cuadro, los colores y el óxido se integran en el mensaje de una historia interminable. “Me pasaría horas y horas hablando de cada uno de los cuadros”.

La que fuera periodista quince años antes encuentra el arte muy parecido a su antigua profesión: “A la hora de pintar me planteo qué quiero decir y cómo quiero expresarelo. Hay que tener muy claro lo que quieres comunicar. También se parece un poco al torero: hay que tener la mente fría y clara, y el corazón caliente”.

La ganadora del certamen El Toro Bravo encuentra en los colores primarios la forma de transmitir no sólo estados de ánimo sino ”la luz, el color y la vida del mundo taurino”.

La comunicación entre el cuadro y el artista a la hora de plasmar el mensaje se extiende al público gracias a un texto explicativo de la historia relatada, ya que a juicio de Marcos-González “hay que explicar las obras para que el mensaje llegue mejor. Además, los cuadros se enriquecen con ello”.

Mónica Zabálburu. Crítica de arte de La Gaceta de Salamanca.
Exposición realizada en el Palacio de Garcigrande. Septiembre 1995.




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